miércoles, 15 de junio de 2011
No pensé que fuera a importar
el tono de tu mensaje, ah.
Me dejaste la sensación
de haber sido un peso más en tu equipaje.
Todavía me aferro a tu amor
como un hierro caliente, ah.
Me hice tan resistente al dolor
Y a la decepción últimamente.
Creo, creo
no en lo que me cuentan
sino solo en lo que veo.
Por lo que veo, creo
que ya te has olvidado de mí,
siento que te pierdo no hay señal
Aló aló ¿hay alguien ahí?
Tanta indiferencia me hace mal
Aló aló ¡sigo aquí!
No respondo a otro timón
que a esta rara devoción, por ti.
El derrumbe de la soledad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario